miércoles, 15 de enero de 2014

ELEGÍA DE UN RAYO.





Te arden las manos.
No es hastío de torneo,
son las bravuras de tus rayos,
que como un rayo, 
¡te han partido
en medio del patio y del recreo!

Joven costalero,
clarea la penumbra de tus ojos
y el enamoramiento vergonzoso
que se quedará en borrasca
en los meses del invierno.

 Se glorifica la vida
cuando la tarde mancilla la mañana
y la deja descansar en la noche
para esperarla en su madrugada, 
aunque no estés durmiendo.

¡Recuerda cuando te marchaste!,
la viste sofocar tu hombría.
Tragaste valor, partiéndote los puños
en medio del patio, con la rebeldía herida,
¡y fulminada por un rayo!

Cuando marchaste de esa casa 
¡eras un niño!
Ahora que eres hombre de herramientas,
elegía de un rayo cuando se calienta
por un enamoramiento tormentoso.

Le diste tiempo a crecer,
y a desmenuzar la lluvia, 
a glorificar tu ausencia
y recordarte en la cima.

Vientos al mirarla
¡sientes!,
sin olvidarla 
¡quieres!,
sin poder llorarle 
¡desapareces! 
como los grandes chopos centenarios de la tierra.

Te arden las manos 
y no es hastío de torneo,
¡son bravuras y  rayos!,
cuando te has partido los puños
en medio del patio y del recreo.


3 comentarios:

  1. ¡¡Poeta!! Creces amiga mía, creces, no te pongan jamas un solo limite.

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  2. ¡¡¡ MARAVILLOSO !!! tengo un hijo adolescente y me ayuda, Te seguiré.

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  3. Siempre me hace temblar con sus palabras/poemas. Muchas gracias y, por favor, no deje de escribir.

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Gracias por vuestra visita a mi blog, espero que mis publicaciones hayan resultado de vuestro interés. Si me lo haces saber, mejor!!!!