Aunque me muera,
cien veces muerta me viera,
y de esas cien veces mí piel se devolviera
pero a tus labios de la tierra.
pero a tus labios de la tierra.
Aunque me entierren y no viviera,
no seria mi muerte peor,
que una muerte, ¡mas una muerta sería!
morir matándome el alma cada día.
Aunque secasen mis tapas de huellas
y abriesen la madera por cenizas,
yo querría despertar pero a tu lado,
ni la mano de Dios, ni la del otro lado,
querría la tuya siempre, Oriolano.
Aunque me muera,
ResponderEliminarcien veces muerta me viera,
y de esas cien veces mí piel se devolviera
pero a tus labios de la tierra.
Aunque me entierren y no viviera,
no seria mi muerte peor,
que una muerte,¡ mas una muerta seria!
morir matándome el alma cada día.